jueves, 22 de diciembre de 2011

Adiós, corazón

¡Hola! Como bien se dice por ahí... "renovarse o morir". Y como un blog va variando inevitablemente al mismo ritmo que cambia una vida, tengo que decir que he cerrado una etapa de mi vida para empezar otra.

Estoy en una especie de transición, que siempre he tenido muy claro que nació en marzo-abril. Incluso en aquella época me di cuenta de que estaba cambiando radicalmente.

Así que, como buena navideña que soy, tengo que hacer un balance de 2011. ¿Ha sido un año bueno o malo? Ha sido un año raro. Pero que muy raro. Empezó muy bien, una despedida digna del que fue, y no exagero si digo que creo que será, el mejor año de mi vida. Es difícil explicar cómo un año puede ser el mejor de tu vida pero lo sabes cuando miras atrás y no recuerdas ni un solo momento infeliz (o lo recuerdas, pero pasas olímpicamente).

Y.. volviendo al 2011. Primer año de universidad. El año de "las hostias", por decirlo vulgarmente. Esto pasa cuando estás acostumbrada a ser una cursi romántica con unos objetivos claros y sales del huevo y te chocas con la realidad. Esto pasa, cuando llevas toda la vida en un colegio, con la misma gente, con tu idea de "voy a salir y voy a estudiar una carrera, y ante todo que me guste".
Y de repente sales y empiezas a vivir, que si buscarte la vida, que si conocer gente nueva, que si enrollarte con chicos desastrosos. Que si viajar a cascoporro, que si conocer gente nueva, otra vez...
Y así todo se va llenando de buenos y malos recuerdos, sin olvidarse de la gran decepción con la universidad, por supuesto.

Así que bueno, después de unos muy malos meses de crisis existencial, de miedo a crecer, de "no saber qué hacer con mi vida" ... sigo sin encontrar mi camino, aunque hace poco encontré algo que me hace sonreír. Eso sí, estoy triste y ahogada. Por primera vez en mi vida, y sin tonterías de adolescente, creo que puedo decir que hace un tiempo ya que no soy feliz.

Pero como, aunque por fuera parezco más coitada de lo que soy, la mitad de mi corazón es optimista, cierro la entrada y el 2011 citando al gran Ismael Serrano, que siempre está ahí para mí y para recordarme que "me acuerde de vivir".

"Creerás que el tiempo pasa rápido, que el buen recuerdo puede doler, pero has venido a recordarnos que no es tan malo crecer".

Un beso a todas, y feliz navidad.

2 comentarios:

  1. Lo más importante es llegar a ese momento en el que decides despedirte de esa etapa de tu vida para empezar una nueva.

    Lo importante es que la empieces con la ilusión renovada y que esas hostias te enseñen lo que tienes que hacer y no hacer a partir de ahora. Pero bueno, no todos conseguimos eso. Seguramente volverás a caer mil veces más, y otras mil veces más volverás a levantarte.

    Pensaba que eras más mayor, y resulta que estás en primero de carrera jejeje Pues disfruta de este momento de tu vida, con el tiempo recordarás a esos idiotas con una sonrisa en la cara. Es que al final, nos quedamos con lo bueno. Eso si, te advierto que idiotas te vas a encontrar siempre, por lo menos hasta mi edad...

    Espero poder leerte más a menudo y mucho más optimista. Este año también ha sido el mejor de mi vida, y llevo días preparando mi entrada del balance de 2011. Ya tenemos otra cosa en común ;)

    ResponderEliminar
  2. Bueno mi comentario no será tan currado como el de arriba pero aún así... ¡Feliz Navidad para ti también!
    Y recuerda: "al mal tiempo buena cara" seguro que ya has oído esto de alguna abuela/o-padre/madre-hermano/a-amiga/o ¡fijo! pero seguro que no de una seguidora, ¿eh? xD
    A decir chorradas no me gana nadie,lo sé, así que me despido ya...
    Ciao y besos! ^-^

    ResponderEliminar